Este peculiar tomate es de lo más heterogéneo en formas, como puedes ver en la foto, es achatado, más bien pequeñito, bastante dulce y con unas pequitas doradas por la parte de arriba que lo hacen realmente bonito.

Al ser una variedad de fruto pequeño es de producción temprana, así que podrás empezar a deleitarte con ellos desde junio hasta que lleguen los fríos. Además, la planta es bastante productiva y resistente a las plagas.

Suelen consumirse crudos en ensaladas, o, para las persona enamoradas del sabor tomatero, cortados en rodajas con un poquito de aceite y sal. Si le das el toque de trocitos de albahaca, ya triunfas.

Suele ser más cómodo trabajar con las matas encañadas, siguiendo un marco de plantación de unos 80 cm entre líneas y 50 cm entre plantas.

La fecha de siembra de las semillas se alarga desde enero a marzo, mientras que el trasplante a huerta será cuando las plantas tengan unos 10 cm de altura y ya no haga frío, más o menos entre abril y mayo.